03/07/2020

La Empresa Familiar: Doce Claves para el Éxito (5 de 13) Clave 4ª: “Abrir camino a la iniciativa de la joven generación”

Escrito por: Rafael Rodríguez Díaz y Jacqueline Rodríguez Cabrera

Empresa familiar

Tal y como vimos en el primer artículo de esta serie de trece entregas hay doce claves para el éxito de las empresas familiares, siendo la cuarta de ellas: “Abrir camino a la iniciativa de la joven generación”, que es la que presentamos a continuación.

La Empresa Familiar: Doce Claves para el Éxito (5 de 13)  Clave 4ª: “Abrir camino a la iniciativa de la joven generación”

Esta clave y las once restantes se desarrollan ampliamente en nuestra obra La Empresa Familiar: Doce Claves para el Éxito, tanto en su versión audiovisual como en la versión escrita (libro), que podrá encontrar a través de nuestra web naruconsultora.com.

En muchos dirigentes de cualquier tipo de empresas es característico el controlarlo y decidirlo todo. Los fundadores suelen desarrollar esta forma de dirigir, pero, también, cualquier otro miembro de una empresa familiar, tanto si está formada por un equipo de hermanos/as como si lo está por un grupo de primos/as. Puede ocurrir, incluso, que una hermana tenga un estilo participativo en el departamento comercial que ella dirige y que su hermano, que dirige el departamento de administración, insista en estar en todo.    

La persona emprendedora que ha fundado su propia empresa y ha logrado que sobreviva a los primeros años, que son de grandes dificultades, ha tenido que luchar contra todo tipo de adversidades. Esto, normalmente, confiere a estas personas una gran capacidad de lucha. Durante esta etapa es habitual tener que hacer todo tipo de trabajos en la empresa, tomar hasta las más mínimas decisiones y estar absolutamente en todo. La experiencia les ha dictado, tras haber encargado trabajos a subordinados y, al final, por una razón o por otra, verse obligado a realizar la tarea, que si quieres que algo funcione tienes que hacerlo tú mismo”. Como consecuencia de ello, estas personas tienden a pensar que saben hacerlo todo mejor que nadie en la empresa, con excepción de ciertos trabajos muy técnicos”, y terminan no delegando nada. De hecho, lo que verdaderamente les funciona es concentrar las decisiones, encargarse de las principales tareas y controlarlo todo. Se genera, de este modo, la creencia de que el éxito requiere de un auténtico empresario” al frente y de ayudantes” que se limiten a hacer lo que se les manda en cada momento.

En empresas de 50 a 100 trabajadores, o de mayor tamaño poco complejas, estas actitudes y estilos de dirección pueden funcionar realmente bien. Hay empresas de estas dimensiones basadas en este tipo de dirección que son muy rentables. Sin embargo, esta forma de dirigir que tanto éxito pudo haber tenido en el pasado se puede convertir en un obstáculo para la salud y supervivencia de la empresa a largo plazo, porque maniata la iniciativa en el negocio.

En un negocio familiar hay que abrir camino a la iniciativa de la joven generación y esto significa que la generación mayor debe superar, si lo padece, el síndrome de controlarlo y decidirlo todo, debe, además, abrirse espacios en los que los jóvenes puedan desplegar sus propios criterios y aprender a tomar sus propias decisiones. Y, también, debe establecerse una política de retiro para la generación al cargo, esto es, el momento en que esta generación se hace a un lado y traspasa el bastón de mando a la siguiente generación.

Esta clave se desarrolla en el cuarto capítulo de nuestra obra La Empresa Familiar: Doce Claves para el Éxito, tanto en su versión audiovisual como en la escrita (libro). Ambas versiones están unificadas y se complementan, capítulo a capítulo, como base para el diálogo y la comunicación de las familias empresarias. Podrá encontrar ambas versiones a través de nuestra web naruconsultora.com.

El viernes de la próxima semana publicaremos el sexto artículo de esta serie que desarrolla la quinta clave que es: “Establecer reglas para la incorporación de los hijos e hijas que garanticen su adecuada formación, actitud y competencia”.

“Abrir camino a la iniciativa de la joven generación”